Coqui, our new project manager in Bolivia, gets “his feet wet” on first trip out to San Martin. Appears they have had more rain than us!


MI PRIMER VISITA A SAN MARTIN DE PORRES (BENI-BOLIVIA)

Un día antes recogimos el material y lo cargamos a la camioneta para salir temprano según lo programado, como hay pronóstico de lluvias cubrimos todo con una carpa para proteger las cosas, apenas amaneció partimos con las profesoras Cristina y Dayana hacia nuestro destino.

Después de un viaje de 4 horas sobre asfalto llegamos al ingreso a la comunidad, un camino de tierra que había sufrido daños por la reciente inundación, lo que me hace pensar que este  viaje será toda una aventura.

Avanzamos unos kilómetros y nos encontramos con el primer obstáculo, el camino está cortado por el agua, que hacemos? no queda otra que improvisar para poder cruzar, buscamos en los alrededores y empezamos a colocar troncos de madera para hacer un puente rustico que permita pasar la camioneta, mientras estamos colando la madera, llegan dos comunarios a ayudarnos, ellos estaban preocupados por las condiciones del camino y salieron a nuestro encuentro, así que entre todos lo hicimos más rápido y pasamos ¡Lo logramos!!!.

Nuestra emoción no duro mucho avanzamos unos kilómetros y otra vez las condiciones del camino no nos permitieron avanzar, así que tomamos la decisión de dejar la camioneta a un lado del camino y seguir a pie, revisamos las cosas que teníamos que llevar con nosotros y no sabíamos por dónde empezar, entonces el comunario que nos acompañada nos dice que no nos preocupemos porque enseguida llegarían  más personas a ayudarnos,  a los lejos logramos ver niños, hombres y mujeres con carretillas viniendo a nuestro encuentro, respiramos tranquilos y con la ayuda de todos pudimos continuar, ahora a pie.

Caminamos 3 km y el puente de madera que hay para cruzar el rio se encuentra bajo el agua, al otro lado más comunarios esperándonos y un bote listo para cruzar, así  que todos nos dispusimos a quitarnos los zapatos y a pisar barro para poder llegar al bote, subimos las cosas a la embarcación haciendo una cadena humana, una vez en el bote nos dimos cuenta de la fuerza de la corriente, que entre todos tuvimos que remar para llegar al otra lado, descargamos todo y a caminar por 3 kilómetros más.

 

Al fin llegamos, vamos caminando por la comunidad y los niños atentos a la nueva profesora Cristina, nos reciben con una buena limonada, agobiados por el calor tomamos un descanso.

Aquí se ve el compromiso con el proyecto… es de todos, trabajamos en equipo y llegamos!!!!

 

Rene (Coqui)

COORDINADOR DE PROYECTOS ALMA-BOLIVIA